La Comisión de Participación Ciudadana designará el jueves a su nuevo líder, que luego será nombrado en la Asamblea Nacional.

Aspectos administrativos como gestión presupuestaria, sede, integración de la estructura organizacional, adquisición de perfiles de personal, estatutos, etc., para el funcionamiento de la Autoridad de Protección de Datos Personales han centrado los planes de trabajo de los tres candidatos a ocupar la Autoridad.

En audiencia celebrada ante el Comité de Control Social (CPCCS). Siete miembros de la Junta de Participación y Control Social de Ciudadanos escucharon, el 27 de marzo de 2024, los planes de trabajo de tres solicitantes nominados para tomar la lista de Superintendentes de datos personales enviados por el presidente de la República, Daniel Nemaa Azín, el asesoramiento público es parte de la regulación para seleccionar esta institución, Aunque tres postores tuvieron que esperar casi tres horas para presentar sus proyectos.

La reunión comenzó a las 10:00 horas, los consultores de la CPCCS llegan alrededor de las 11:30; discutieron otros temas y minutos antes comenzó el examen final a las 13:00 horas. La selección de esta institución se apega a la ley orgánica de protección de datos personales, que rige desde mayo de 2021, y desde entonces su aplicación. pendiente. El reglamento de selección establece que luego de la audiencia oral, se da un día para seleccionar positivamente las instituciones, «en concreto, se debe explicar cómo el candidato seleccionado cumple con los estándares de profesionalismo y mérito y por qué».

La decisión de nombramiento será enviada a la Asamblea Nacional para que designe formalmente un director que ejercerá un mandato de cinco años y agregará funciones de transparencia y control social. Este miércoles se presentaron tres candidatos:

  • Fabrizio Roberto Peralta
  • María Paulina Casares Subia
  • Luis Fernando Enríquez Álvarez

Los tres se conocieron profesionalmente y en un ambiente cordial explicaron sus planes para la elección, que coincide con el primer paso: establecer el sistema institucional, como lo establece la ley, pero en la práctica el trabajo será encontrar una oficina, un escritorio. y una silla. Depende de los recursos que asigne el Estado, ya que el presupuesto general del Estado no incluye partidas para el establecimiento de agencias reguladoras.

Fabrizio Peralta se dio cuenta de que tenía que crear una entidad que tuviera vida legítima, pero no vida real. «La primera prioridad es obtener los recursos necesarios para funcionar; un núcleo de contribuyentes donde será eficaz. Pero también hay limitaciones presupuestarias y tendremos que trabajar con las regulaciones propuestas», afirmó.

Esto se hace informando a las personas que tienen derecho a proteger sus datos personales. La segunda persona incluida en la lista, María Paulina Casares, recomienda utilizar los mecanismos dispuestos por las autoridades de control para promover el monitoreo social con el fin de monitorear la implementación de políticas nacionales que promuevan la protección de la información personal. Sin embargo, el primer paso será crear una matriz y buscar apoyo del Ministerio de Trabajo para encontrar profesionales y luego de la Secretaría Nacional de Planificación para autorizar la agencia. «Va a ser un trabajo duro y no va a ser fácil porque tenemos que hacer manuales de procesos, estructuras orgánicas, operaciones, y hasta que no tengamos eso no podemos saltar al vacío. Los equipos de construcción tienen que estar listos, «Hay que entender las cuestiones presupuestarias, no podemos ir más allá de lo que nuestras carreteras, mano de obra, técnicos e infraestructura nos permiten», comentó.

Luis Enríquez tuvo criterios similares y a su vez enfatizó que este órgano de control es una estructura técnica que necesita estructurarse y concretarse a nivel estratégico. Su trabajo propone fortalecer herramientas para prevenir el abuso de materiales públicos, la transparencia y la creación de servicios al usuario.

Además, cree que debería existir un sistema de gestión de datos antes de imponer sanciones y que la estimación debería ser limitada a la hora de investigar una posible filtración de datos personales. La Autoridad de Datos Personales, así llamada por ley, es responsable de garantizar la protección de datos de todos los ciudadanos y tomar todas las medidas necesarias para asegurar el cumplimiento de principios, derechos, garantías y procedimientos. Entre sus funciones se encuentra la inscripción, gestión y gestión de bases de datos de datos personales en el registro nacional de datos personales.